viernes, 22 de enero de 2016

La felicidad y la pésima calidad de la educación en Colombia

En menos de dos años, hemos recibido dos noticias que para el país son importantes (tanto que los periódicos no se callan a la hora de difundirlo): Colombia ocupa el primerlugar como el país más feliz del mundo[1] y el último lugar en las pruebas Pisa[2]. Como quien dice, felices e ignorantes. Eso parece corroborar aquella antigua idea de que la felicidad es inversamente proporcional a la inteligencia: la gente más feliz es la gente estúpida y los inteligentes son los que más sufren[3].  

En cuanto a la medición de la felicidad, esta se hizo a través de una encuesta en la que se preguntaba directamente a los implicados sobre el grado de satisfacción con sus vidas. Para no entrar en detalles, un promedio de 85% de las personas aseguraron que eran felices. Algo interesante es que el mismo estudio asegura que solo el 48% de las personas creen que en 2016 las cosas irán mejor. ¿Se puede ser feliz pensando que el futuro se dibuja pésimo? Aun así, Colombia es el más feliz del mundo. Cosa extraña en un país como este, con la inflación en aumento en los últimos años, el costo de vida, la rápida devaluación del peso, el PIB en descenso, un deshonroso lugar 80 (entre 180) del PPA, los problemas de orden público, la corrupción en las entidades del Estado, los engaños y ocultamientos del proceso de paz, unas leyes hechas para favorecer a los delincuentes, miles de delitos en la impunidad y la pésima calidad de la educación.

Sobre todo, la pésima calidad de la educación, que para los últimos años ha dejado a Colombia en los últimos lugares (para 2014 el último lugar) de las pruebas Pisa.  Dicha evaluación es realizada por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y para 2014 midió “la habilidad de 85.000 estudiantes de 15 años, 9.000 de ellos colombianos, para resolver problemas de la vida real con los que no están familiarizados”[4]. No quiero entrar en detalles que a la larga vendrían a ser vergonzosos para mis compatriotas. Lo cierto es que entre 44 países, fuimos los peores. Y lo peor es que esta noticia no es nueva, en los años anteriores los resultados habían sido similares, ocupando el penúltimo puesto.

Sólo hay que ver cómo se imparte la educación en los colegios públicos del país. Un currículo obsoleto que no desarrolla las competencias para la época actual. Unos profesores desactualizados cuya finalidad a la hora de hacer una maestría es subir su escala salarial. Una intensidad horaria en la que se pierde tiempo valioso de clases en diversas “ferias y fiestas” con actividades sin sentido ni propósito educativo. Unos estudiantes preocupados por el refrigerio y el almuerzo, por el novio o la novia y por conseguir el mejor celular, y totalmente apáticos a cualquier actividad que implique su formación académica. Unos profesores sin autoridad real dentro del aula ni autoridad moral para impartir el orden. Unos directivos más preocupados por las bonificaciones a recibir por la cantidad de alumnos o los logros del colegio que por el bienestar de los estudiantes. Un gobierno interesado en hacer descender las cifras de deserción y mortalidad académica, aunque para ello tengan que obligar a los docentes a promover al estudiante incluso sin siquiera presentarse a las aulas. Y eso sin hablar de los problemas que los directivos y el Estado se empeñan por esconder (seguramente piensan que aquello que no se nombra, no existe): drogadicción, alcoholismo, delincuencia, tráfico de drogas, hurto, bullying y otros más.

¿Y nos asombra que los colombianos sean los peores en las pruebas Pisa?


Y es quizás esta ignorancia generalizada la que convierte a las personas en seres más felices. Parece ser que nadie es consciente de su realidad, que el “pan y circo” que les ofrece el Estado a través de un refrigerio y un almuerzo, y un montón de ferias y fiestas en los colegios es lo que más tarde los hace felices: satisfacer una necesidad estomacal y un poco de entretenimiento. Y eso es lo que se queda en la vida a futuro: personas a quienes les basta sólo lo suficiente como para cubrir sus necesidades básicas y unas cuantas fiestas, un partido de fútbol o una buena película para su deleite personal. Y no más.

Este asunto es preocupante. Una persona que se siente feliz no intentará cambiar sus condiciones actuales de vida, por lo tanto, no buscara oportunidades para para progresar ni conseguir más de lo que ya tiene ante sí. Y eso a la larga lo único que trae es estancamiento para el país, porque el progreso de una comunidad sólo se logra cuando todo en los individuos progresan.

Esto pareciera un círculo vicioso maldito: la ignorancia brinda felicidad, pues no deja analizar el entorno y sus problemas lo cual lleva a generar una conformidad con unas condiciones de vida precarias; la felicidad a su vez genera estancamiento, pues nadie que se dice ser feliz intentará cambiar sus condiciones de vida, por lo tanto, no buscara oportunidades de progreso, no estudiará lo cual generará más ignorancia.

¿Estaremos los colombianos condenados a ser cada día más felices y más idiotas?

Quisiera irme a vivir a un país de gente infeliz, no sólo porque son más inteligentes, sino porque la infelicidad nos hace movernos para buscar la forma de progresar y hallar aquello que creemos que nos hace falta y así, finalmente, conseguir bienestar.

Y para finalizar un texto que se hizo viral hace algunos años y que demuestra la involución de nuestro sistema educativo. Aunque está en son de chiste, no es una exageración, además no hay que olvidar aquello de que “entre broma y broma la verdad se asoma”.

LA EDUCACIÓN DE HOY  
Ahora discuten los H.Ps. (honorables parlamentarios) un proyecto de ley para volver a la promoción automática de alumnos. Hasta hace poco éramos más inteligentes porque EXISTÍA la posibilidad de perder el año, de habilitar, y ahora, están "escandalizados" porque 700 mil alumnos van perdiendo el año. En nuestras épocas, ¿cuántos perdían? ¿O es que las matemáticas, la biología o las ciencias sociales han avanzado tanto que ya se volvió más difícil estudiar? ¿Qué es eso de que "ahora nadie pierde el año"? ¿A quién se le ocurrió la genial idea de "los logros"? ¿Cómo puede un logro ser recuperado si durante todo el año no se estudió y a última hora con una prueba de una semana y un examen aprueban vergonzosamente el año de vagancia? Hoy la mayoría de los alumnos son perezosos, no leen, todo se los hace el Internet y aun así, los H.Ps. están interesados en volver a la promoción automática. Colombia se ha caracterizado por tener gente culta, gente de buen hablar y escribir. ¿Los muchachos de hoy tienen buena ortografía? ¿Saben de verdad qué fue el Frente Nacional? ¿Un estudiante de hoy sabe realmente lo que significa 3/4 o 4/5?
 
A ver si pasando este mensaje de amigo a amigo finalmente llega a manos de alguno de los ponentes de la ley y reflexionan sobre si Colombia merece este daño tan irreparable.
 
Un país es lo que su gente sea. Si auspiciamos la chambonería el país será eso: un país mediocre y chambón, producto de una educación y una crianza muy defectuosa.

LA VERDAD ES QUE SE SIENTE EL CAMBIO DE EDUCACIÓN GENERACIONAL
La semana pasada compré un producto que costó $15.800. Le di a la cajera $20.000 y busqué en los bolsillos $800 para evitar recibir más monedas cuando me diera los vueltos. La cajera tomó el dinero y se quedó mirando la máquina registradora, sin saber qué hacer. Intenté explicarle que ella tenía que regresarme $5.000 de cambio, pero ella no se convenció y llamó al gerente para que la ayudara. Tenía lágrimas en sus ojos mientras que el gerente intentaba explicarle y ella continuaba sin entender.

¿Por qué les estoy contando esto?
Porque me di cuenta de la evolución de la enseñanza desde 1960 y de las condiciones actuales que se manejan en muchas escuelas públicas, y peor en las privadas, tanto en el ámbito académico como en el trato a los alumnos. Ahora los NENES nunca pierden el año, aparte de inoperantes son "intocables", sacando las instituciones educativas generaciones déspotas y nefastas a la sociedad y al país.
 Vean Uds. lo que ha sido la evolución en materia educativa, en matemáticas, por ejemplo:

 1. Enseñanza de Matemáticas en 1960:
Un cortador de leña vende un carro de leña por $100.000. El costo de producción de ese carro de leña es igual a 4/5 del precio de la venta.
¿Cuál es la ganancia?

 2. Enseñanza de Matemáticas en 1970:
Un cortador de leña vende un carro de leña por $100.000. El costo de producción de ese carro de leña es igual al 80% del precio de la venta.
¿Cuál es la ganancia?

 3. Enseñanza de Matemáticas en 1980:
Un cortador de leña vende un carro de leña por $100.000. El costo de producción de ese carro de leña es de $80.000.
¿Cuál es la ganancia?

 4. Enseñanza de Matemáticas en 1990:
Un cortador de leña vende un carro de leña por $100.000. El costo de producción de ese carro de leña es de $ 80.000. Escoja la respuesta correcta que indica la ganancia:
( ) $ 20.000 ( ) $40.000 ( ) $60.000 ( ) $80.000 ( ) $100.000

 5. Enseñanza de Matemáticas en 2000:
Un cortador de leña vende un carro de leña por $100.000. El costo de producción de ese carro de leña es de $80.000. La ganancia es de $20.000.
( ) Verdero ( ) Falso

 6. Enseñanza de Matemáticas en 2010:
Un cortador de leña vende un carro de leña por $100.000. El costo de producción de ese carro de leña es de $80.000. Si Ud. sabe leer coloque una X en los $20.000 que representan la ganancia..
( ) $ 20.000 ( ) $40.000 ( ) $60.000 ( ) $80.000 ( ) $100.000

 ¡¡¡No te rías, es en serio!!!


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